El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo durante una entrevista radial que buscará la reelección, si su candidatura evita que el país vuelva a ser gobernado por «trogloditas».
En una clara referencia al gobierno de Jair Bolsonaro (entre 2019 y 2022), Lula señaló que no permitirá que el país vuelva a ser «condenado por un negacionista».
«Si fuera necesario ser candidato para evitar que los trogloditas que gobernaron este país vuelvan a gobernar, (…) yo podría ser candidato», aseguró el mandatario durante una entrevista a la emisora CBN del grupo Globo.
Lula, sin embargo, recalcó que una nueva candidatura para asumir la jefatura del Estado no está entre sus objetivos prioritarios, por la edad, pues estaría en campaña con 80 años y tiene que pensar en su estado de salud para
entonces.
«Hay que ser responsables con Brasil, pero no voy a permitir que Brasil vuelva a ser gobernado por un fascista», insistió.
Lula se ha posicionado siempre de manera firme contra la gestión de Bolsonaro, un nostálgico de la dictadura militar, defensor de la explotación de los recursos naturales de la Amazonía, y uno de los pocos líderes negacionistas de la pandemia de la covid-19, que dejó unos 700 mil muertos en Brasil.
El líder progresista, hoy con 78 años, asumió su tercer mandato en enero de 2023 tras vencer en las elecciones a Bolsonaro, uno de los referentes de la extrema derecha de América Latina, y después de haber gobernado el país durante dos periodos consecutivos, entre 2003 y 2010.
Presidente se lanza contra líder del Banco Central
También, Lula da Silva criticó fuertemente a la cabeza del Banco Central, Roberto Campos Neto, por no bajar los tipos en el país y señaló que al directivo le falta autonomía y trabaja para «perjudicar» al país.
«Sólo tenemos una cosa que está mal en Brasil en este momento, es el comportamiento del Banco Central, eso es algo que está mal, señaló Lula, durante la misma entrevista radial a la emisora CBN.
Según el mandatario brasileño, el presidente del organismo emisor «no demuestra ninguna capacidad de autonomía», «tiene un lado político» y «trabaja mucho más para dañar al país que para ayudar», porque no hay una explicación para que la tasa de interés básico anual esté tan alta.
Las declaraciones de Lula se dieron un día antes de que el organismo emisor defina la nueva tasa básica de interés para el país, que según los expertos del mercado se mantendrá en 10.50 por ciento anual, frenando así los cortes consecutivos que venía realizando desde agosto del año pasado.
De hecho, en marzo pasado, cuando ordenó un corte de 0.25 puntos, el Banco Central comenzó a desacelerar el ritmo de disminución del costo del dinero, ya que venía promoviendo cortes de medio punto, para ayudar a frenar la inflación, que se ubica en 3.9 por ciento en el interanual.
La tasa básica de intereses en Brasil está en su menor nivel desde agosto del año pasado cuando llegó a ubicarse en 13.75 por ciento anual.
Desde que comenzó su tercer mandato en enero de 2023, Lula ha promovido una reducción más drástica de los tipos «para que la economía del país vuelva a crecer» y se ha regado en críticas frente al actual presidente por su gestión.
Durante la entrevista, el mandatario brasileño también cargó contra actitudes «políticas» del directivo del Banco Central, quien se ha mostrado cercano al gobernador de São Paulo, Tarcicio de Freitas, un aliado del expresidente Jair Bolsonaro y quien suena como candidato para asumir la jefatura del país.
Incluso llegó a compararlo con Sergio Moro, «un paladín de la justicia con el rabo atado a compromisos políticos».
El exjuez puso a Lula tras las rejas y dejó la magistratura para unirse al gobierno de Bolsonaro, el mayor rival político del líder progresista.