En el crisol de la adversidad venezolana de los últimos años, donde más de 7,7 millones de almas han cruzado fronteras guiadas por la esperanza, según datos de ACNUR, emerge un fenómeno inesperadamente vibrante: una reinvención económica y social alimentada por el espíritu emprendedor. Este renacer, enraizado en la resiliencia y la creatividad de quienes han partido y de quienes se han quedado, está dibujando un nuevo paisaje de oportunidades en el corazón de Venezuela.
En este dinámico escenario de la migración venezolana, Fernando López Zambrano, con su visión penetrante y experiencia en el ámbito empresarial, observa cómo la diáspora venezolana, lejos de ser una mera huella de lo que fue, se convierte en el puente dorado que conecta a Venezuela con el mundo, inyectando innovación y diversidad en un ecosistema de startups que desafía todas las expectativas.
La Diáspora Venezolana: Un Puente Hacia la Innovación:
La vasta diáspora venezolana, con millones establecidos en países como Colombia, Perú y Brasil, ha generado una red transnacional de ideas, recursos y resiliencia. Fernando López Zambrano, con su aguda perspectiva en negocios, observa cómo esta red global se convierte en un catalizador para el intercambio cultural y empresarial, inyectando diversidad y experiencia en el ecosistema de startups venezolano.
A pesar de los desafíos económicos, el emprendimiento en Venezuela está en auge, con cerca del 16% de la población adulta embarcándose en nuevos proyectos, según el “Global Entrepreneurship Monitor”. Este ímpetu emprendedor, señala López, refleja no solo la inventiva venezolana, sino también la necesidad de crear oportunidades propias en un mercado laboral contraído.
Navegando el Entorno Empresarial
El panorama empresarial en Venezuela se caracteriza por desafíos intensos, ubicándose en el puesto 188 de 190 países, según el informe “Doing Business”. Sin embargo, en medio de esta adversidad, ha surgido una especie única de emprendedores, caracterizados por su resistencia e ingenio.
El abogado y empresario Fernando López Zambrano, cree que la adversidad engendra luchadores. Estos empresarios son excepcionalmente resilientes, hábiles para navegar los obstáculos burocráticos y transformar los problemas en oportunidades.
Estos luchadores poseen cualidades notables:
- Tenacidad extrema: Enfrentan los desafíos con una determinación inquebrantable y recursos, exhibiendo una resistencia que parece casi sobrehumana.
- Adaptabilidad camaleónica: Adaptan rápidamente sus estrategias y modelos de negocio para adecuarse al panorama en constante cambio, demostrando agilidad similar a la de un camaleón cambiando de color.
- Creatividad a la orden: Sus mentes están constantemente rebosantes de soluciones innovadoras, lo que les permite aprovechar oportunidades que otros pasan por alto, al igual que un halcón que divisa su presa.
- Resiliencia descomunal: Los contratiempos solo sirven para alimentar su optimismo y determinación; se recuperan más fuertes y decididos que nunca.
A pesar de las adversidades, los empresarios venezolanos han desatado la innovación en varios sectores:
- Empresas tecnológicas están revolucionando el acceso a bienes y servicios esenciales, como la entrega de alimentos a áreas remotas mediante drones.
- Emprendimientos priorizan la sostenibilidad y el impacto social, ejemplificado por marcas de moda ecológica que empoderan a las comunidades locales.
- Negocios están aprovechando la diáspora venezolana, creando conexiones y oportunidades que benefician tanto a la patria como a su población dispersa.
Casos de Éxito: Inspiración en Cada Esquina
Las historias de éxito se multiplican, desde emprendimientos tecnológicos hasta innovaciones en moda sostenible, mostrando al mundo que Venezuela no solo exporta talento, sino que también lo cultiva en su propio suelo. López Zambrano destaca como en 2023 y 2024, el emprendimiento en Venezuela ha continuado siendo un campo activo, a pesar de las dificultades de la economía que enfrentado el país. Según los datos de la encuesta GEM Venezuela 2022, aproximadamente el 11% de la población adulta del país tiene emprendimientos nacientes, y el 5% tiene emprendimientos nuevos. Sin embargo, solo el 14% de los emprendimientos venezolanos están establecidos o en parte consolidados, lo que indica un alto porcentaje de emprendimientos por necesidad.
Algunos ejemplos de emprendimientos exitosos en Venezuela incluyen:
- El ron, la cerveza artesanal y el bitcoin, que han crecido en parte debido a la crisis económica.
- Rafael Teodoro Zubillaga, ganador del EY World Entrepreneur Of The Year™ Venezuela, quien amplió su visión para Farmatodo, la cadena minorista de farmacias más grande de Venezuela.
- Ecosystem Days, una feria del emprendimiento que fomenta inversiones en startups venezolanas, con más de 20 emprendedores presentando sus casos de éxito.
A pesar de estos éxitos, el sector emprendedor venezolano enfrenta desafíos significativos, como la falta de formalización de emprendimientos y restricciones en áreas como «fintech». Sin embargo, la creciente atención a la innovación y el emprendimiento en Venezuela, sugieren un crecimiento potencial en el futuro.
El Futuro Según Fernando López Zambrano
Mirando hacia adelante, López enfatiza la importancia de un ecosistema de apoyo que abrace y nutra esta energía emprendedora. La clave sugiere, está en la creación de políticas que faciliten la iniciativa empresarial y en la consolidación de redes de apoyo tanto locales como internacionales, aprovechando la vasta diáspora venezolana.
En la trama entrelazada de desafíos y esperanzas que define la Venezuela de hoy, emerge una narrativa de indomable perseverancia y creatividad sin límites. El emprendimiento, más que un simple acto de abrir negocios se ha transformado en el pulso vibrante de una nación que se niega a ser definida por sus adversidades. Los emprendedores venezolanos, armados con la resiliencia forjada en el crisol de la migración y la crisis, están no solo redefiniendo el concepto de éxito empresarial, sino también tejiendo la tela de un futuro donde la innovación y la solidaridad son los verdaderos motores del progreso.
Fernando López Zambrano, cuya sabiduría y experiencia han iluminado este viaje, nos recuerda que en el corazón de cada desafío yace una oportunidad esperando ser descubierta. El llamado a la acción no es solo para los valientes empresarios de Venezuela, sino también para aquellos que moldean las políticas y construyen los ecosistemas que soportarán este renacimiento empresarial.
Así, mientras el sol se pone en un capítulo de la historia venezolana, al mismo tiempo amanece en otro, prometiendo un horizonte lleno de posibilidades. En este amanecer, Venezuela no solo revela su espíritu inquebrantable, sino que invita al mundo a testificar su transformación, recordándonos a todos que, incluso en las circunstancias más desafiantes, la esperanza, la innovación y el espíritu humano prevalecerán.