Llega la hora de la verdad. EE.UU. decide en su martes electoral entre la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump tras una campaña que ha mostrado la polarización del país y con sondeos poco concluyentes. Todo puede pasar y el mundo mira las consecuencias que tendría la elección de una u otro para la geopolítica planetaria.
Harris o Trump. Llega el momento de la decisión de decisiones. La que no sólo va a definir el destino político de EE.UU. Sino probablemente el del mundo. Los sondeos no son concluyentes y la noche del martes electoral promete ser de infarto. Todo se decide en 7 estados bisagra, los llamados swing states.
A medida que se acerca el 5 de noviembre -día en el que se celebrarán las elecciones en Estados Unidos-, Kamala Harris y Donald Trump reafirman su interés en seducir a los votantes de los estados péndulo estadounidenses.
Este viernes 1 de noviembre, el objetivo fue Wisconsin, uno de los siete estados indecisos de este año. La actual vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata, al igual que el expresidente y candidato republicano, se presentaron en ese estado, en eventos que se llevaron a cabo a pocos kilómetros de distancia.
Y no es sorprendente la decisión de visitar este territorio del medio oeste estadounidense, ya que ambas candidaturas afirman que la lucha por los 10 votos electorales de este estado es cada vez más reñida.
De hecho, cuatro de las últimas seis elecciones presidenciales en Wisconsin se decidieron por menos de un punto porcentual (o menos de 23.000 votos).
El sábado 2 de noviembre, Harris y Trump coincidirán de nuevo, en Carolina del Norte, otro estado péndulo.
La vicepresidenta estará en Atlanta y Charlotte, mientras que el exmandatario visitará Gastonia y Greensboro.
Los últimos sondeos reflejan lo reñido de estos estados bisagra. En Wisconsin, por ejemplo, la medida de las encuestas indica una ventaja de Harris sobre Trump por siete décimas: 48,7% frente a 48%.
En cuanto a Carolina del Norte, que entrega 16 votos electorales, Trump está por delante por 1,1 puntos porcentuales: 48,4% frente a 47,3% de la líder demócrata.